Tecnólogas del siglo XXI: Ángela Abreu

 

Se define como apasionada de la tecnología, los idiomas, el cine, viajar y descubrir cosas nuevas. Nuestra compañera Ángela tuvo las ideas claras sobre su futuro como tecnóloga desde niña, y no ha desaprovechado ni un segundo para conseguirlo. Esta pontevedresa considera fundamental seguir fomentando la participación femenina en las carreras STEM popularmente conocidas por “ser un mundo de chicos” y ve referentes a todas las que ya trabajan en el sector. Estudiante del Grado en Ingeniería de Tecnologías de Telecomunicación por la Universidad de Vigo, hoy trabaja en su proyecto de fin de carrera en el área de Comunicaciones Avanzadas de Gradiant, y lo vive como un hobbie del que aprender y disfrutar.

 

¿A qué querías dedicarte cuando eras pequeña?

Desde pequeña tuve muy claro que quería estudiar una carrera de ciencias o tecnología. Me fascinaban las matemáticas, para mí era como jugar con los números. Siempre me esforcé en entenderlas en lugar de estudiarlas, y a raíz de eso comencé a pensar en ser ingeniera.

¿Por qué te decidiste por la tecnología?

Siempre tuve curiosidad por saber cómo funcionaba todo, por conocer qué había detrás. Empecé a adentrarme en este mundillo y cuando tuve que escoger a qué quería dedicarme para mí solo existían dos opciones: ingeniería de telecomunicaciones e ingeniería aeroespacial. Sin duda alguna, no me equivoqué. La ingeniería mueve el mundo, cambia por completo la vida de las personas, y yo quiero formar parte de ese cambio haciendo lo que me gusta.

¿En qué estás trabajando actualmente?

En Gradiant formo parte del equipo de Comunicaciones Avanzadas. Ahora mismo estoy trabajando en el diseño y desarrollo de algoritmos para la cancelación de interferencias en un sistema de comunicaciones.

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

Lo que más me gusta de mi trabajo es no considerarlo como tal. Hay una frase que dice que “si trabajas en algo que te gusta no tendrás que trabajar ni un día de tu vida”, y eso es lo que me ocurre en Gradiant. Además de poder dedicarme a lo que he estudiado, disfruto haciéndolo. Me encantan los retos y en este campo cada día aparecen nuevos desafíos que superar y de los que aprender.

¿Quién es tu referente femenino en el mundo de la tecnología?

La verdad es que cualquier mujer que emprenda su carrera en el mundo de la tecnología es un referente para mí. Sigue siendo importante fomentar la participación femenina en las carreras tecnológicas, ya que la visión general es que se trata de un “mundo de chicos”. Aun así, Hedwing Eva María Kiesler siempre me ha llamado mucho la atención.

¿Cómo imaginas tu carrera en el ámbito tecnológico? ¿A dónde te gustaría llegar?

Me encantaría trabajar en el mundo de la bioingeniería. Es un campo que me fascina y que tiene un gran potencial que explotar. Adaptar la medicina a los avances tecnológicos y poder progresar en el diagnóstico, prevención y retroceso de enfermedades es el presente, pero sobre todo el futuro. También me gustaría gestionar y participar en proyectos de telecomunicaciones revolucionarios de gran impacto en la sociedad.

¿Qué les dirías a aquell@s que están pensando en escoger la rama tecnológica de cara a sus estudios?

Les diría que elegir algo que te gusta es un acierto. Formar parte de un mundo que es pionero en los avances tecnológicos y el progreso te da la posibilidad de formar parte de una renovación continua, tanto profesional como personalmente. Animo a aquellos que les guste la tecnología a estudiar una carrera así. Que no dejen que la “fama” de ser algo difícil les eche para atrás. La ilusión y las ganas de aprender siempre harán que valga la pena.