#SomosCompromiso: ODS 2030, garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todos

Hoy más que nunca, el mundo depende de la energía. Sin embargo, sabemos que buena parte de esa energía se produce mediante procesos poco respetuosos con el medio ambiente, por lo que balancear la progresiva dependencia energética con el cuidado del planeta se ha convertido en uno de los principales retos de la década. Así lo reconoce las Naciones Unidas que en sus Objetivos de Desarrollo Sostenible de cara al 2030 donde recoge el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para todos como una prioridad.

En Gradiant estamos seguros de que será la propia tecnología la que consiga reducir el gasto energético y, por lo tanto, disminuir las emisiones resultantes de su producción. Creemos que para lograrlo son necesarias dos tecnologías básicas con las que llevamos años trabajando. Por un lado, las relacionadas con la conectividad y por otro, las que utilizan la Inteligencia Artificial como principal herramienta.

 

Conectividad

Así, apostamos por implementar sistemas de comunicaciones de bajo consumo, esto es, enfocar el desarrollo tecnológico no solo hacia un aumento de las funcionalidades de dichos sistemas, sino también a su eficiencia a nivel energético. Todo sin dejar de lado uno de los mayores retos a los que nos enfrentamos en este sentido, el de asegurar la conectividad del entorno rural.

Del mismo modo en el que la industria del automóvil ha conseguido multiplicar la potencia y tecnología de sus productos a la vez que reducían considerablemente sus emisiones, en el sector de las comunicaciones se conseguirá seguir innovando mientras se reduce la cantidad de energía que requieren los dispositivos.

 

Inteligencia Artificial

El sector industrial, por su volumen de negocio y sus procesos productivos, es uno de los que más energía consume. Somos conscientes de que una gran parte de este gasto puede ser reducido con la modernización de sus sistemas. En esta modernización tienen un valor muy importante los procesos de optimización energética de los procesos industriales y del sector primario. Esto se consigue mediante sofisticados sistemas de Inteligencia Artificial que aprovechan cada kilovatio de energía y evitan en gran medida el desperdicio.

Sin embargo, alcanzar el llamado Green AI sigue siendo un gran reto. Pese a que la inteligencia artificial puede ayudar a optimizar el consumo de todo tipo de sistemas, el AI como tal ya supone un gasto muy importante. En concreto, los procesos de deep learning requieren de una gran cantidad de energía, que con la normalización del Green AI irán progresivamente convirtiéndose en procesos más sostenibles.

De esta forma, demostramos cómo la propia tecnología puede ayudar a reducir el gasto energético de los procesos industriales. De este modo, cuanto más consigamos optimizar los recursos, más sostenible y respetuoso con el medio ambiente será la producción.