Tecnólogas del siglo XXI: Araceli Goiriz

 

En Gradiant, nos propusimos hace cuatro años empezar esta serie de entradas llamada Tecnólogas del siglo XXI porque somos conscientes de lo importante que es mostrar y difundir la labor de las mujeres referentes en el ámbito de la tecnología. Muchas veces no hay que buscarlas muy lejos ni geográficamente ni en el tiempo. Gracias a esas personas inspiradoras que motivaron a la protagonista de la entrada de hoy, Araceli Goiriz Seoane es ingeniera informática especializada en ciberseguridad. En Gradiant trabaja en el área de Seguridad y Privacidad, en el proyecto FACENDO que promueve la competitividad del sector automovilístico en Galicia. En su tiempo libre, a esta vilalbesa le gusta pasear por la naturaleza y hacer postres. Su otra gran afición es viajar para conocer la cultura y gastronomía.

 

¿A qué querías dedicarte cuando eras pequeña?

El primer recuerdo que tengo de “querer ser” fue el de ser profesora (creo que como casi todas las niñas, al final era el ejemplo femenino que teníamos más cerca sin ser el de nuestras madres), también pasé por la época de querer ser peluquera creo que por el mismo motivo; y después, ya cerca del instituto quise ser informática, creo que fue desde el momento en que mis padres me compraron mi primer ordenador con 10 años.

 

¿Por qué elegiste la tecnología?

A lo largo de mi vida he sentido curiosidad por buscar soluciones a problemas del día a día, por mejorar la vida de las personas. Esta fascinación creo que viene desde pequeña, pues recuerdo siempre a mi padre haciendo uso del ingenio para solucionar cualquier contratiempo que se presentase en casa, arreglando aparatos eléctricos e inventando nuevas funciones a objetos y materiales cotidianos y, al final, esa curiosidad que yo sentía se acabó traduciendo en una filosofía de vida, sumar soluciones pequeñas para dar solución a grandes problemas.

Además de la parte más social de la tecnología, siempre me ha gustado imaginar y entender cómo serían los avances del futuro, “vivir actualizada”, algo así como un reto en el que quería estar y la tecnología me brindaba todo esto.

 

¿Dónde te planteaste hacer la carrera? ¿Por qué?

En este caso no he tenido muchas dudas, por cercanía y porque lo que quería hacer era Informática me decanté siempre por Coruña. Además, me gustaba la ciudad y algunas de mis amigas y amigos iban a estar por allí. Cuando tienes 18 años también es un punto que tienes en cuenta.

 

¿En qué estás trabajando actualmente?

Actualmente, trabajo en el área de Seguridad y Privacidad, en concreto, estoy en el proyecto FACENDO que se lleva a cabo con otras entidades con el que se busca incrementar y mejorar la competitividad del sector de la automoción de Galicia. En el equipo al que pertenezco, utilizamos honeypots industriales para detectar y analizar los ciberataques que recibe una red industrial. La información que nos proporciona este análisis es de gran valor puesto que, además de aportarnos conocimiento sobre el tipo de ataques recibidos, ayuda a mejorar los sistemas de protección de los entornos industriales alejando a los atacantes de sus activos reales y fortificando la red de la organización con la inteligencia adquirida.

 

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

Lo que más me gusta de mi trabajo es el ambiente que hay. La mayor parte del tiempo estoy en modalidad de teletrabajo. Sin embargo, las distintas reuniones (de trabajo o para hablar de cualquier cosa) con las compañeras y compañeros, la colaboración existente entre las distintas áreas y los coffee mornings mensuales hacen muy agradable el trabajo del día a día.

 

¿Quién es tu referente femenino en el mundo de la tecnología?

Pues creo que no he tenido referentes hasta después de haber elegido la carrera, tal vez porque ya te diriges al área que más te gusta. 

Espero que hoy en día sea distinto en los colegios y el mensaje sea otro. Cuando yo era pequeña, la única mujer científica de la que se nos hablaba era Marie Curie y el mensaje, para mí, era claro: para llegar a ser alguien en la ciencia había que ser impecable y demostrar mucho más que los hombres. Era algo casi inalcanzable, es como si solo llegara a conseguirlo una mujer en todo un siglo. Se pintaba a las profesiones más “feminizadas” como algo más “fácil” para nosotras y la ciencia no era algo en lo que fuésemos a destacar. 

Afortunadamente, al llegar a la universidad, sí que he encontrado esas referentes, y creo que ha sido importante que se tratase de mujeres contemporáneas. 

En mi caso, poder ver desde la facultad toda la carrera de Amparo Alonso y, además, que fuese mi profesora y directora del proyecto final, ha sido un aliciente para saber que el camino que había escogido con 18 años era el que quería seguir. Amparo Alonso es catedrática en la Universidad de A Coruña y, en ella, puso en marcha el grupo de investigación LIDIA (Laboratorio de I+D en Inteligencia Artificial). Su labor como investigadora, docente y divulgadora es todo un ejemplo.

A la hora de decantarme por el Máster en Seguridad Informática y no por otro, también ha tenido gran importancia para mí el ejemplo de mujeres que son referentes en el mundo de la ciberseguridad. Una de las que más ha influido en mi decisión ha sido Pilar Vila, su gran labor de divulgación y sus aportaciones en el área de la informática forense han hecho que haya querido profundizar más en este campo. 

 

¿Qué le dirías a l@s tecnólog@s del futuro?

A las tecnólogas les diría que sigan el camino que ellas consideren y que si alguien les intenta establecer límites en cuanto a su capacidad o valía deben tener claro que esos límites son los de la persona que les está hablando, nunca los de ellas. En realidad, este puede ser un mensaje global, pero es cierto que por ser mujer es posible que se encuentren más a menudo ante esa situación. 

También a todos, tecnólogos y tecnólogas del futuro, les diría que las distintas visiones del mundo y nuestras vivencias pueden ser las herramientas más transformadoras para mejorar cualquier sistema. Todas las personas somos importantes y, más si cabe, cuando se trata de la tecnología que influye día a día en todas.

 

 

 

 

 

 

Facendo 4.0 (Competitividad Industrial y Electromovilidad a través de la Innovación y la Transformación Digital) es el proyecto puesto en marcha por Stellantis Vigo, en el marco de la cuarta convocatoria de ayudas del Programa de la Fábrica Intelixente de la Xunta de Galicia, con el objetivo de contribuir a incrementar la competitividad y reforzar el tejido empresarial del Sector de Automoción de Galicia.